Porque esta tilapia tiene algunas características que la hacen totalmente única. En primer lugar nos encontramos ante el pez fluvial con el crecimiento más acelerado del mundo, por lo que en lo que adquirimos siendo un pequeño y vivaz pez de poco más de dos centímetros pronto adquirirá un tamaño mucho mayor. Junto a su tamaño aumenta igualmente su voracidad y fiereza. La tilapia acabará con cualquier otro habitante del acuario de su tamaño e incluso mayor, siendo por lo tanto un pez que tan sólo puede vivir en solitario o con otros de su especie. El propio cuidador tiene que tener precaución si mete la mano al acuario, puesto que la tilapia no dudará en atacarla con mordeduras muy dolorosas. A modo de ejemplo la labor de limpieza del acuario en las tilapias entraña bastante más riesgo que la de un acuario de pirañas.
Así las cosas el acuario debe de tener un tamaño superior a 250 litros, y unas condiciones de diez grados de dureza y 6,5 de ph. Hay que pensar, no obstante, que las tilapias son uno de los peces más adaptables que existen, pudiendo sobrevivir (aunque en peores condiciones) con parámetros muy diferentes. Su alimentación será omnívora, consumiendo desde alimento vivo a verduras y papillas congeladas, además de todo tipo de alimentos comerciales. La esperanza de vida de las tilapias es superior a los 20 años, lo que la convierte en uno de los peces más longevos.